La construcción de nuevos cines en ciudades con menos de 100.000 habitantes fue un proyecto de Lula Da Silva que se conoció en el 2010 y que en algunos lados decían "menos iglesias y más cines".
Este proyecto fue modificado y aprobado la semana pasada por el Senado de Brasil donde estableció que habrá distintas líneas de crédito por un total de 800 millones de reales, unos 440 millones de dólares.
En la nota de THR firmada por el argentino Agustín Mango se destaca que además 16 empresas que reúnen el 40% del total de los cines del país, se unieron junto a distribuidoras nacionales y norteamericanas para negociar la transición masiva a la digitalización.
De esta manera los cines lograrán una financiación mixta, ya que a los préstamos del gobierno, se suman los "subsidios" que entregan las distribuidoras por los estrenos digitales que se llaman Virtual Print Fee (VPF), que básicamente es lo que actualmente se ahorra cada distribuidora en no hacer una copia en 35mm.
En charlas con la industria en nuestro país, estos VPF representan unos 700 dólares por estreno aproximadamente, o sea un 50% del costo de hacer una copia en 35mm.
Se sabe de la existencia de algunos acuerdos internacionales, donde una distribuidora norteamericana le paga a una gran cadena ese importe por cada estreno de su propiedad, y si se compromete a digitalizar el 100% de sus salas en un plazo determinado, que puede ser de 2 o 3 años, luego le paga un importe similar extra, es decir que si ahora estrena una película digital le abona unos 700 dólares y al cumplir la meta de digitalzación, le abona lo mismo de nuevo retroactivamente, por cada estreno que haya quedado dentro del acuerdo. Es decir el cine se llevaría unos USD 1.400. Esto se estima será por un tiempo limitado.
Igualmente la mayoría de los acuerdos va solamente por el pago del VPF que ronda los 700-800 dólares por estreno digital.
Es por eso que en Brasil se han unido y analizado todo en conjunto. La unión de la parte pública y la privada va en busca del progreso de la industria del cine, lo que favorecerá la llegada a todo el país de la digitalización.
Como aporte importante del estado de Brasil está la eliminación de muchos cargos de importación como se adelantó en este sitio en octubre pasado para el caso de los proyectores. Pero la nota de THR indica que va ahora también va para todo lo necesario para modernizar o construir una sala de cine, por lo que se incluyen butacas, sistemas de sonido, etc, etc.
En la actualidad el 21% de las salas existentes en Brasil son digitales indica THR, de un total de 2.377 reportadas por FilmB, el Ultracine brasilero.
Se destaca en el informe que en el 2011 se vendieron 143 millones de entradas con un total de 770 millones de dólares recaudados. Según Wikipedia en Brasil hay 203 millones de habitantes, por lo que su promedio de entradas por habitantes está aun bastante bajo y tiene mucho por crecer.
Seguramente este apoyo del gobierno de Brasil va en busca del crecimiento, para hacer honor al "Orden y progreso" de la bandera de dicho país.
