Pero con el arranque de Luna nueva se hizo evidente que cambió el comportamiento del público también. Y me refiero al comportamiento de decidir cuándo ver una película.
No apunté a hacer una serie de notas después de explicar cómo están cambiando las formas de la distribución de películas en la era digital, pero me di cuenta que tenía que separar los cambios en toda la era digital. En próximos días pondré los cambios que están haciendo las empresas de cines en los nuevos proyectos y como lograr que existan muchos más cines en el país para los tiempos que corren.
Pero volvamos a esta era del cine 2.0
Y para ver mejor el avance de la era digital en la comunicación, nada mejor que comparar los arranques de las Harry Potter.
La última de Potter tuvo el doble de espectadores en el primer día que las anteriores… y era en el medio de la gripe A. Metió en su primer semana más de 600.000 espectadores. Eso fue la mitad de lo que hizo en el total de su proyección. O sea, no cambió la cantidad de espectadores totales, si no que lo que cambió es el momento que elige la gente para ir a verla.
Con el caso de Luna nueva, sí hay un aumento de espectadores con respecto a su primer parte. Crepúsculo, hizo en total poco más de medio millón pero eso es porque la saga comienza a ser conocida por otras personas, y eso ya no le pasa a Potter a esta altura del partido.
Pero el arranque de Luna nueva tuvo una cifra casi similar a la última de Potter y seguramente esta cifra sea superada por el estreno de Eclipse en las próximas vacaciones de invierno, ya que estimo que se harán más copias, los cines estarán con la venta anticipada desde antes y podrán programar interlockings para los primeros días, y así de esta manera poder satisfacer la demanda inicial tan poderosa.
Hace un tiempo, una de las personas que mas conocen de la industria de cine en la Argentina, gerente comercial de dos distribuidoras importantes que están en nuestro país, me mostró como el mercado argentino se está “yankilizando”. En Estados Unidos hace tiempo que una película tiene el 30 a 40% del total recaudado en su primer fin de semana. Eso se puede hacer porque se estrena con muchas copias. Las cuales posiblemente no lleguen a la tercer semana en su totalidad. O sea hay una oferta muy fuerte inicial y el público se apura a verla en la primer semana.
¿Qué estuvo primero? ¿El huevo o la gallina? No importa, es acción y reacción, de un lado y del otro. Da lo mismo. Es un cambio que en la Argentina se está notando en los últimos años.
Siguen existiendo pocas películas que el boca a boca logre que siga vendiendo por muchas semanas más. Si no existieran los prejuicios con el cine argentino (a causa de tantos juicios con sentencia en firme… ) El secreto de sus ojos debería haber metido un millón de espectadores en su primer fin de semana! Y no los 300.000 que tuvo en el arranque, y los 2.000.000 que sumó luego! Eso es algo atípico pero tiene otras razones.
¿Pero que es lo que influyó en este cambio que está sucediendo y que se notó con Harry Potter y el misterio del príncipe y de Luna nueva?
Facebook.
En le década del 90 el mundo se dividía entre los que tenían celular y los que “todavía no”. Siendo que muchos de estos últimos decían que jamás tendrían uno, y al final cedieron.
Con Facebook también podemos dividir al mundo de personas que tienen mínimos conocimientos de tecnología, los que están y los que todavía no entendieron como hacerlo… o cual sería el beneficio de hacerlo. Conozco a varios fundamentalistas que finalmente entraron… pero es cuestión de tiempo.
El tema es que películas como Harry Potter o Luna nueva, tienen mucho agite natural en las redes sociales. Uno se entera de amigos que quieren ir a verla, que ya compraron su entrada anticipada, que la amaron cuando la vieron, o que la odiaron. No importa. Uno sabe que fulano de tal, un amigo nuestro la vio. Y no se enteró por el noticiero o porque vio un afiche en el Clarín. Se enteró porque en su chequeo diario de la red social personas palpables le informaron que ya estaba estrenada o si valia la pena verla.
Muchos se meten en esta vorágine y eso es lo que lleva al éxito inicial. Y salen de verla y ponen en su “que estás pensando” su conclusión al respecto.
Si bien mi perfil en Facebook no es parámetro de comparación (tengo más de 2.300 amigos) vi muchas fotos en estos días de chicas yendo a ver la película, comentarios de novios diciendo la tortura que tendrían que pasar o que no fue tan terrible la misma. Gente que le dijo en que función no escuchó gritos o avisos tipo “saquen para la función tal que vamos todas”…
Eso logra Facebook. Es un marketing 2.0 que no lo manejan las empresas.
Miren lo que pasó con Harry Potter… los medios estaban sembrando el miedo de la Gripe A. Todo el mundo estaba recluido en sus casas bañándose con alcohol en gel, y usando su computadora. Estaban aburridos.
Y comenzaron a ver que de a poco sus amigos decían que irían a ver Harry Potter… ¿están locos? Habrá pensado más de uno. Pero cada vez eran más los locos inconscientes… entonces llevó a replantearse a más de uno si los locos estarían cuerdos y en realidad uno era paranoico…
Y el día del estreno fueron miles y muchos de ellos informaron a todos sus amigos que habían ido y daban su opinión de la película. Resultado: muchos rompieron el miedo con la película y en el medio de la gripe A, con cines cerrados o con disposiciones ridículas de “dejar un asiento libre” por decretos municipales, Potter tuvo el doble de espectadores que las anteriores en el primer dia… y dos años con la película anterior antes no existía Facebook! O nadie lo conocía.
Como decía José Luis Chilavert… no importa que hablen mal o bien… pero importa que hablen.
Bueno, igual si hablan muy mal eso también puede hundir mucho más rápido a una película, como ya pasó este año con varias en los Estados Unidos. Lo que hacen los medios sociales es “acelerar” las decisiones. En Estados Unidos dicen que Bruno se hundió via Twitter, donde la gente suele mandar un sms a su cuenta y dejar su sentencia de manera mucho más rápida que Facebook. Todavía acá no ha penetrado tanto entre los usuarios pero posiblemente llegue a crecer un poco más
Harry Potter tendría ese público final… pero las redes sociales lo comprimieron al comienzo.
Y no es algo que está destinado a estos tanques norteamericanos. En la Argentina El secreto de sus ojos también logró un éxito impresionante y seguramente fue ayudada por Facebook, porque aceleró el boca a boca. Y demuestra que Facebook está entrando en otras franjas de edad. Gente mayor de 40 años también se va metiendo y comentan las cosas que hacen… a veces en mayúsculas… pero lo hacen.
Mi madre contó a sus amigas que le había gustado El secreto de sus ojos en su facebook… ¿y hubiera llamado a sus amigas para decirles que le gustó la película? Seguro que a una… pero el resto se enteró de manera fácil.
Los tiempos van cambiando y la industria del cine va viendo los cambios en todas sus partes. Los espectadores son parte de este cambio y estos hechos lo demuestran.